Los mayores efectos de la ola de inseguridad en las provincias costeras de Manabí, Los Ríos, Esmeraldas y Guayas están en la actividad comercial. Desde el 25 de julio al mediodía, los comercios en el centro de la ciudad de Esmeraldas cerraron por la alarma de explosivos y los hechos de violencia que se estaban viviendo en varios puntos de la ciudad. En el sector Las Palmas, cerca de la playa, las calles estaban desoladas en la tarde del 26 de julio, con escasa o nula circulación de personas y autos, en una zona de alto movimiento turístico para esta época del año. “Estábamos tratando de salir del derrame de petróleo ocurrido en Las Palmas (el 19 de julio) y ahora hay este escenario que a la vista es dantesco”, dice Jorge Benítez, presidente de la Cámara Provincial de Turismo de Esmeraldas.
Fuente: Primicias.
Last modified on 2023-07-27