Después de las violentas protestas, el equipo económico del gobierno entra en una nueva etapa: renegociar una serie de metas clave con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y activar, además otras fuentes de financiamiento para el país. Aunque Ecuador logrará pasar 2019 “sin sobresaltos de financiamiento”, como lo asegura el ministro de Finanzas, Richard Martínez, el año entrante será duro y transcurrirá en un contexto internacional poco favorable, marcado por tensiones comerciales entre las potencias del mundo y la apreciación del dólar. “Hemos estado en contacto con las autoridades del Fondo al más alto nivel y lo positivo es que hay una voluntad de las partes para adecuar los indicadores” inicialmente pactados en el acuerdo de marzo a la nueva realidad del país, dice Martínez. Fuente: Primicias, 20 de octubre.
Last modified on 2019-10-21