Según el Informe Mundial sobre la Trata de Personas 2020 publicado por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), un 50% de las víctimas de trata en el mundo son sometidas con fines de explotación sexual. La segunda causa más común es el trabajo forzado, con un 38% de las víctimas detectadas hasta 2018. Además de estas dos modalidades, el tráfico de seres humanos puede tener otros fines como la participación en actividades criminales, la mendicidad, los matrimonios forzados, la venta de bebés y la adopción ilegal, la extracción de órganos y otras formas mixtas de explotación. El estudio también echa luz sobre el perfil de las víctimas: la mayoría son mujeres, un 46%, mientras otro 19% son niñas. El 35% restante se compone de un 20% de hombres y otro 15% de niños.
Como muestra este gráfico de Statista, el continente americano es la región del mundo donde la explotación sexual es la modalidad más común en casos de trata. Por ejemplo, en América Central y el Caribe, ocho de cada diez víctimas de trata son sometidas con fines sexuales. Sudamérica, a su vez, es la región americana con la más alta prevalencia de trabajo forzado, con un 35% de las víctimas. Esta última modalidad es la más común en el África Subsahariana, así como en Asia Central y del Sur.
Cada 30 de julio la UNODC conmemora el Día Mundial contra la Trata de Personas. Este mes, la organización informó que dicho flagelo empeoró desde la pandemia de COVID-19. Si bien las organizaciones dedicadas a la lucha contra la trata continuaron brindando servicios esenciales a pesar de las restricciones, los traficantes se aprovecharon de la crisis mundial, capitalizando la pérdida de ingresos y las mayores vulnerabilidades de las víctimas ante la dificultad de recibir ayuda y acceso a la justicia en condiciones de aislamiento social.
Fuente: Statista
Last modified on 2021-08-09