No es solo que el tráfico de órganos, es decir, el intercambio de estos por dinero, sea ilegal en la mayoría de países del mundo (con excepción de Irán), sino que también esta es una práctica vista como inmoral en prácticamente todas las culturas. Sin embargo, esto no quita para que si uno se ve en la extrema necesidad de hacerlo, se pueda plantear recurrir a ella. Así, como muestra esta infografía de Statista, en algunos países de Latinoamérica, un alto porcentaje de personas afirman que si no tuvieran otra opción para salvar la vida de un ser querido o la propia, comprarían un órgano. Así, por ejemplo, a la pregunta "¿compraría un órgano en caso de que usted o un familiar cercano tuviera su vida en riesgo?", un 51% de los peruanos da una respuesta positiva, siendo este el país con menos prejuicios respecto a esta práctica, según una encuesta de la plataforma Opinaaméricalatina.com.
Last modified on 2018-04-18