Este lunes, durante la jornada inaugural del Foro Internacional "Ejército-2022", el presidente ruso Vladimir Putin expresó el aprecio de Moscú por sus fuertes lazos con los países de América Latina, Asia y África. El mandatario también aprovechó la oportunidad para ofrecerse a facilitar equipamiento militar moderno a sus aliados en esas regiones, así como a entrenar combatientes extranjeros.
Rusia cuenta con Venezuela, Cuba y Nicaragua como fieles aliados en Latinoamérica, pero la mayoría de los Estados de la región le dieron la espalda a Putin tras la invasión de Ucrania. Aun así, el nuevo ofrecimiento ruso deja en claro que el Kremlin no abandona sus aspiraciones de volver a ganar peso en el territorio latinoamericano.
Según datos del Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación de la Paz (SIPRI, por sus siglas en inglés), Estados Unidos se mantuvo en 2021 como el mayor proveedor de armamento y formador internacional de fuerzas armadas de América Latina. En Chile, aproximadamente el 38% de los 57 millones del Valor Indicativo de Tendencia (Trend-indicator value o TIV*) de las importaciones de armas procedieron de EE.UU.
Mientras tanto, el país norteamericano representó casi la totalidad de las transferencias de armas a Colombia y un 100% de las mismas a El Salvador, Honduras y Panamá. Curiosamente, la mayoría de las importaciones de armas a Brasil y México ese año provinieron de Suecia, con importaciones de armas desde ese país por 126 millones de TIV y 3 millones de TIV, respectivamente.
* A través del llamado Trend-indicator value (TIV), SIPRI mide el volumen de las transferencias internacionales de las principales armas convencionales. El TIV se basa en los costos de producción unitarios que se conocen de un conjunto básico de armas. Mas que el valor financiero de la transferencia, esta medida pretende reflejar la transferencia de recursos militares.
Last modified on 2022-08-22