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A febrero 2021, el mercado laboral mantuvo su característica de alto grado de informalidad. De enero a febrero hubo una reducción de la PEA en más de 57 mil personas, mientras que la tasa de desempleo se mantuvo constante en 5,7%. El subempleo y el otro empleo no pleno tuvieron un incremento de 0,9% cada uno. Además, los ingresos laborales promedio cayeron en $ -123,8 de enero a febrero, volviendo a estar por debajo de los $ 400 dólares.

La Encuesta Nacional de Empleo, Desempleo y Subempleo (ENEMDU) de febrero de 2021 fue publicada el pasado lunes 22 de marzo. A partir del 2021, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) ha informado que publicará cifras mensuales de los indicadores laborales con representatividad a nivel nacional y por área (urbanas y rurales), mientras que antes de la pandemia se publicaban trimestralmente. Además, se añadirá publicaciones de cifras acumuladas por trimestre y anual, de tal forma que sería la primera vez en contar con cifras del mercado laboral acumuladas.

Sin embargo, por el momento los resultados de estas últimas encuestas no son comparables con los periodos anteriores, hasta que se realice un empalme completo. Hay dos razones principales para ello. La primera es que hubo cambios metodológicos en el tamaño, la distribución de la muestra y representatividad estadística, a eso se suma que desde septiembre de 2020 se aplica una metodología de levantamiento mixta con entrevistas cara a cara y por llamadas telefónicas. Y, la segunda, es por la estacionalidad, dado que es la primera vez que se publican resultados de mensuales y no se puede comparar con un resultado que no sea del mismo mes de los años anteriores.

El director ejecutivo subrogante del INEC, Víctor Bucheli, resaltó que aunque los datos del 2020 no sean estrictamente comparables sí son datos de referencia.

De los 17,7 millones de habitantes, a febrero 2021 hay más de 12,6 millones de personas en edad de trabajar (PET), de los cuales 65,5% está dentro de la población económicamente activa (PEA), que equivale a 8,3 millones de ecuatorianos. Esto significa una reducción de la PEA en 57 mil personas, es decir, ciudadanos que han decidido retirarse del mercado laboral por una u otra razón, mientras que la PET sigue creciendo cada mes.

Desde la crisis sanitaria, y consecuentemente socioeconómica, por el COVID-19, el mercado laboral ha ido en decadencia. Aunque los empleos se han recuperado progresivamente se ha mantenido un mercado laboral deteriorado con más desempleo, menor empleo adecuado e incremento sustancial de la informalidad (Gráfico 1).

Gráfico 1

Desempleo, empleo adecuado y empleo inadecuado

 

 

En el segundo mes del 2021, el desempleo se mantuvo en 5,7%, igual que en el mes anterior, pero con un incremento de 0,7 puntos respecto al cierre del 2020. Mientras que el empleo adecuado cayó en febrero en -0,8 puntos respecto a enero, es decir, llegó a 33,2%. Esto también significó una mejora y leve recuperación del empleo adecuado respecto a diciembre de 2020.

Aunque el deterioro del mercado laboral no viene solo por causa de la pandemia, pues desde el 2014 se ha dado una contracción del mercado formal. Y desde el 2019 el empleo adecuado llegó a estar por debajo de 40%. Sin embargo, se distingue una ampliación de la brecha entre el sector formal versus el sector informal.

EL DESEMPLEO ALCANZA NIVELES HISTÓRICOS

El subempleo alcanzó una tasa del 23,2%, es decir, tuvo un incremento de casi 1 punto porcentual de enero a febrero de 2021, siendo el subempleo por insuficiencia de tiempo de trabajo el que cubre la mayor parte (20,5% de los 23,3 puntos). Mientras que el empleo por insuficiencia de ingresos cubrió el otro 2,7%.

Esto da muestras de que el mercado laboral aún sigue limitado ante las precauciones del distanciamiento social y preferencias por el teletrabajo o, más aún, por la contracción de la demanda global que no le permite al sector productivo contratar por jornada completa o pagar al menos el salario básico.

La tasa de desempleo de 5,7% ha sido la más alta registrada desde 2007 -donde constan datos con la metodología anterior- al igual que en marzo de 2016, cuando alcanzó el mismo nivel. Durante el 2020, el tipo de desempleo que creció rotundamente fue el desempleo oculto, o sea desempleados que no buscaron trabajo ni tenían intenciones de hacerlo, debido especialmente al pesimismo sobre la situación del país.

A febrero, el desempleo oculto disminuyó, llegando a 0,6%, en tanto que se desplazaron al desempleo abierto (desempleados en están en busca de un empleo), que alcanzó el 5,1%, siendo la tasa más alta de cualquier año pasado del siglo XXI.

En tanto, de enero a febrero el empleo no remunerado se ha reducido marginalmente, contrario al otro empleo no pleno (trabajan menos horas del estipulado o ganan menos del salario básico, pero no buscan otro empleo) que se incrementó en 0,9 puntos (Gráfico 2).

Gráfico 2

Empleo, desempleo y subempleo

 

 

A LAS MUJERES LES SIGUE COSTANDO MÁS LEVANTARSE DE LA CRISIS

A febrero 2021 también se evidencia un incremento en las brechas de género en torno a la participación laboral. Empírica y estadísticamente se ha demostrado que las mujeres tienden a ser las más desplazadas del mercado laboral en períodos de crisis, y esta vez no ha sido la excepción.

La tasa de empleo global de los hombres se ubicó en 95,4%, mientras que para las mujeres fue de 92,7%. Es decir, existe una brecha de 2,7 puntos, cuando en enero fue de 2 puntos (Gráfico 3). Esto se traduce en que hay un mayor porcentaje de mujeres desempleadas (7,3%) que los hombres (4,6%) ya sea en cualquier tipo de empleo, incluso en el sector informal.

Gráfico 3

Tasa de empleo global por sexo

 

 

La tasa de subempleo es alta para los dos sexos, pero a febrero se incrementó en 0,3 puntos tanto para hombres como para mujeres, lo que significa que la caída de empleo adecuado que hubo entre enero y febrero se trasladó al sector informal.

LOS INGRESOS LABORALES PROMEDIO REGRESAN A ESTAR POR DEBAJO DEL SALARIO BÁSICO EN FEBRERO

Los resultados de enero en torno a los ingresos laborales sorprendieron con un sustancial incremento de $ 142,1 dólares promedio entre diciembre 2020 y enero 2021. Con dicho incremento tanto los ingresos de las mujeres como de los hombres estaban por encima de los $ 400 dólares, que en realidad sería lo ideal, ya que el promedio de los ingresos estaría acorde a la ley. Sin embargo, nunca antes se había llegado a superar o al menos alcanzar los $ 400 dólares. Para febrero del 2021, los ingresos laborales se redujeron a su tendencia inicial llegando a estar en promedio en $ 310,9. No obstante, la brecha salarial se mantiene y alcanza los $ 47,5 dólares para febrero.

Gráfico 4

Ingresos laborales promedio por sexo

 

 

La nueva metodología del INEC tiene sus ventajas y desventajas. Ventajas, porque se incorporan nuevos resultados, como el acumulado trimestral o el acumulado anual, que servirán de análisis durante todo ese periodo y permitirán ver de mejor manera la dinámica del mercado laboral en un periodo de tiempo determinado. Sin embargo, también deja de lado los resultados por ciudad, pues no serán publicados mensual sino solo trimestral y anualmente. Además, todo este cambio metodológico implica la necesidad de empatar los resultados anteriores para tener datos comparables con periodos pasados.

 

(*) Elaborado por Karen Lucero, Revista Gestión.

 

 

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Last modified on 2021-03-26

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