No habrá medidas que erosionen el capital político del nuevo presidente. El anuncio de la proforma presupuestaria de 2017, por el presidente de la República, Lenín Moreno, se hizo a la ciudadanía y sin alzar olas, lo que da una pauta de su interés de divulgar que no habrá metidas de mano al bolsillo de manera directa para aumentar ingresos. No habrá dolor anunciado para recortar gastos a pesar de criticar al Gobierno de Correa que “las decisiones que se tomaron no fueron las más mesuradas, y se puso al límite la economía del país”. Seguirá habiendo metida de mano indirecta al ciudadano por la vía del financiamiento.
Eso sí, la reorganización de las cuentas fiscales se hará, en el mediano plazo, según lo ofrece. Para ello plantean bajar el déficit fiscal de 7,6% en 2016 a 4,7% en 2017 y a un nivel inferior al 2% del PIB en 2021. Pero no dice cómo lo hará, ¿subirá impuestos o los reducirá como piden los empresarios?. La anunciada austeridad supone recorte de gastos corrientes, sobre los cuales no dio ningún detalle y con ello sembró la duda: ¿bajará subsidios?, ¿lo hará en salarios de la burocracia? No sabemos. Pero con su frase de que se “optimizará la inversión pública” es claro que recortará gasto de capital, algo que ya se venía haciendo desde 2015. Solamente el análisis de las cifras de la proforma entregada a la Asamblea Nacional dará mayores luces sobre lo que se piensa hacer, porque en palabras no se ha dicho tanto.
Las cifras dadas retan la realidad
Monto de la proforma de 2017 en $ 36.818 millones sube 2,3% frente a 2016:
No se presentó un desglose de ingresos y gastos, que hubiese sido lo deseable, tan solo se enuncia que este monto es 2,3% mayor que en 2016. Esto sería si se comparan cifras del presupuesto ejecutado y consolidado, que según las fuentes oficiales estaría en el orden de $ 36.000 millones. Pero hay que notar que la proforma de 2016, estimaba el valor del presupuesto inicial en $ 29.835 millones, según los datos oficiales del Ministerio de Finanzas, y el valor que anuncia es un valor inicial. El incremento entre valores iniciales de la proforma sería de 23,4%.
Fuente: Lámina del MinFin de 2016 Evolución del Presupuesto General del Estado 2007-2016 y Proforma de 2017 anunciada 28/07/2017
Déficit fiscal de $ 4.700 millones:
Lenín Moreno fue claro en decir que 2016 terminó con un déficit de 7,5% del PIB, algo que jamás fue aceptado por el equipo económico el año anterior. La reducción propuesta a 4,7% del PIB, se eleva ligeramente del valor dado el 5 de junio por el Ministro de Finanzas, Carlos de la Torre, pero no parece real sin ajustes sustanciales al ingreso y al gasto en este mismo año, puesto que hasta junio -en solo seis meses-, de acuerdo a la ejecución presupuestaria el déficit ya fue de $ 3.105 millones, 66% del déficit presupuestado para doce meses. De continuar sin ajustes, esa brecha fiscal podría crecer hasta fines de año sobre los $ 8.000 millones, según las previsiones del Observatorio de la Política Fiscal, OPF.
Fuente del gráfico: Banco Central del Ecuador, boletines anuarios y mensuales y anuncio del 28/07/2017.
Financiamiento público de $ 11.670 millones y posible reperfilamiento de deuda:
Es a todas luces insuficiente para la totalidad del año, debido a que en los seis primeros meses, ya ha obtenido financiamiento por $ 9.653 millones, según cifras de OPF, que contabiliza endeudamiento interno por $ 5.638 millones. El comentario del presidente Moreno de que buscará mejores condiciones para el endeudamiento, deja ver que su equipo está tratando seriamente el reperfilamiento de la deuda para mejorar las condiciones vigentes. Para lograrlo necesita dar señales claras de reajuste fiscal, lo que no ha sucedido.
Ni más ni menos carga impositiva
Ingresos tributarios a la baja: estos sumarán $ 14.700 millones, mil millones menos que el codificado de 2017 por extensión de 2016 y 5% menor que el de 2016, debido a que desde junio de este año las salvaguardias arancelarias ya no generan ingreso, y en 2017 no se cuenta con los $ 1.538 millones de ingresos por el terremoto. Se entiende que no se aplicarán impuestos nuevos a los empresarios, pero que si llega a haber un desmantelamiento del anticipo del impuesto a la renta o la reducción del impuesto a la salida de divisas, como ellos lo han pedido, esto será gradual.
Ingresos por transferencias, tasas y contribuciones: los ingresos por transferencias de empresas públicas y del Banco Central ($ 3.322 millones), así como los ingresos por transferencias, donaciones de capital e inversión ($ 3.241 millones), se disparan frente a 2016 y frente a todos los años anteriores; más parece que se trata de otra forma de contabilizar ciertos ingresos. Los ingresos por tasas y contribuciones serán de $ 1.609 millones).
Sobre los supuestos macroeconómicos
Fuente: Proforma cuatrianual 2016-2019 presentada en octubre 2016 y anuncio 28/07/17.
Crecimiento del PIB optimista: Moreno ha dado el mensaje de que en 2017 habrá un crecimiento de 0,7%, cuando el FMI en su última publicación (24 de julio , 2017) estimaba que decrecerá -1,6% en este año y -0,3% en 2018. Las cifras del Ministerio de Finanzas sobre la proforma plurianual 2017-2020 presentada en octubre de 2016, señalaba una previsión de 3% en el crecimiento del PIB de 2017.
Precio del petróleo en $ 41,69 por barril: es realista después del nuevo recorte de producción decidido por Arabia Saudita en julio del presente año, y el pedido a los miembros de la OPEP y no OPEP de respetar el acuerdo de reducción de producción. Es un 30% mayor al promedio de 2016, lo que ayudará con los ingresos del estado y a un mejor desempeño de la economía.
Aumentará en 4,6 % la exportación de crudo: el volumen de 136,6 millones de barriles a exportar es mayor en 4,6% al de la proforma de 2016. Hay señales positivas del Ministerio de Hidrocarburos para solucionar los conflictos con las empresas privadas en este sector. Las importaciones de derivados se reducirán apenas un 4% en volumen en 2017 con respecto al año anterior a pesar de la repotenciación de la Refinería de Esmeraldas.
Lo que sí se hará
- Reforma a la Ley de Plusvalía y apoyo al sector de la construcción.
- Ley para repatriación de capital para fomentar inversión privada y sostener dolarización.
- Impulso al dinero electrónico a través de la banca privada, posiblemente sin el Banco Central administrándolo. Este proyecto es riesgoso sin una situación fiscal resuelta, a menos que se lo administre exclusivamente como billetera electrónica, lo cual no fue el origen del proyecto. Por eso seguirá levantando dudas.