Mediante una carta, diversas organizaciones ambientales, sociales, comunidades y representantes del sector privado expresaron su profunda preocupación ante la propuesta de construir la carretera Salcedo-Tena, que atravesaría el Parque Nacional Llanganates (PNL). Este proyecto pone en riesgo la rica biodiversidad de esta área protegida, la conectividad ecológica que garantiza la salud de los ecosistemas y la provisión de servicios ambientales esenciales como el agua potable, que beneficia a miles de personas en la región.
La construcción de una carretera en esta área protegida contraviene la Constitución y las leyes ecuatorianas, que establecen la obligación del Estado de preservar y gestionar efectivamente el Sistema Nacional de Áreas Protegidas. Experiencias previas, como en el Parque Nacional Sangay y el Parque Nacional Yasuní, han demostrado que estas intervenciones no solo fragmentan los ecosistemas, sino que también facilitan actividades ilegales como la minería no regulada y la deforestación, incrementando los impactos negativos sobre la biodiversidad y las fuentes de agua.
Last modified on 2024-12-17