El 83% de todo lo que un niño aprende en su primer año de vida, lo hace a través de sus ojos. Por ello la salud visual es un factor fundamental para garantizar los derechos de los niños, niñas y adolescentes del Ecuador. Es así como la Fundación Metrofraternidad, bajo el marco de su programa de Prevención de Ceguera Infantil, ratifica la labor realizada en 17 años de trabajo en beneficio de dicha causa y, a su vez, celebra el mes de la salud visual.
La ceguera infantil prevenible, así como la discapacidad visual en los niños, constituyen un grave problema de salud pública en el Ecuador. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, la prevalencia de ceguera infantil es de 0,6 por mil niños en el país y – a nivel mundial- al menos 2.200 millones de personas sufren de deterioro en su visión. Sin embargo, en la gran mayoría de estos casos, los especialistas aseguran que la ceguera podría haberse prevenido a través de un tratamiento quirúrgico adecuado.
Y son estas cifras, además de las repercusiones permanentes que tiene la ceguera infantil en el desarrollo educacional, social y económico de un niño, lo que motivó a que el Programa de Prevención de Ceguera Infantil sea uno de los pilares más importantes de la Fundación Metrofraternidad.
Datos relevantes:
- En estos casi 17 años del programa, se han atendido a más de 20.000 niños y realizado más de 5.000 cirugías oftalmológicas de mediana y alta complejidad.
- A diario se realizan entre 10 a 12 consultas en el consultorio de oftalmología pediátrica de la Fundación; con foco en pacientes entre los 0 y 16 años cuya familia se encuentre en una situación socio económica vulnerable.
- Cada mes se hacen jornadas quirúrgicas de oftalmología pediátrica donde se operan entre 8 a 10 casos de estrabismos, cataratas congénitas, glaucomas, entre otros procedimientos.