Menores índices de bancarización, menores oportunidades de acceso al crédito, situación laboral inestable, brechas en la remuneración salarial, violencia en la casa, en los espacios públicos y en el trabajo, son algunas de las barreras que experimentan las mujeres día a día y son también las razones por las que es fundamental un mayor y mejor acceso a servicios de educación financiera, en ese contexto Natalia Garzón, directora ejecutiva de la fundación de Mutualista Pichincha, entidad financiera que incorpora servicios para el acceso a la vivienda en poblaciones vulnerables, explica que una de las dificultades más recurrentes es que al no conocer los términos financieros, muchas mujeres se sienten inseguras al solicitar un servicio.
Frente a esto la directora ejecutiva de la Fundación de Mutualista es enfática en explicar que la generación de las oportunidades es una prioridad para la institución. En el último año, unas 233 mujeres se han beneficiados de sus proyectos de educación financiera y unos 602 créditos directos para vivienda cuyo titular son mujeres. Se destaca que usualmente existe una contribución de la familia o pareja para el pago de la cuota, ya sea el titular hombre o mujer.
Last modified on 2018-03-08