Por Alcaldía de Quito
Segunda edición, Codesan, Alcandía de Quito, 2018
Síntesis:
75 nuevos árboles de las parroquias rurales y los bosques naturales de Quito se han incorporado a la lista de árboles patrimoniales de la ciudad por sus cualidades extraordinarias. Al momento, existen 426 árboles censados: 351 en la zona urbana, 38 en las plazas de parroquias rurales y 37 en los bosques del noroccidente.
La versión actualizada de Los árboles patrimoniales de Quito, segunda edición, incluye ejemplares de los bosques montañosos del noroccidente de Quito, que han sido identificados gracias al Programa de Monitoreo de Biodiversidad de Condesan, en coordinación con los dueños de las reservas privadas que los albergan.
Un árbol patrimonial es una “…planta leñosa, incluyendo arbustos, palmeras y helechos arbóreos, que se destaca por una o varias características de tipo biológico, ecológico, paisajístico, histórico, cultural o social y que –mediante el cumplimiento del trámite correspondiente– es declarada y cataloga como tal”.
La declaración como patrimonio impide que sean cortados, dañados, mutilados o destruidos. Entre los árboles declarados están el quishuar de mangaguántag, considerado un árbol sagrado y destacado por su avanzada edad; el cucharillo, que solo se encuentra en los bosques de Mashpi y mide más de 30 metros; los secuoyas de La Alameda, propios de la costa occidental de Norteamérica, regalados en semillas al entonces presidente Isidro Ayora; el cedrillo blanco, ubicado en los bosques de Nanegalito, que está en peligro de extinción porque su madera es muy apetecida, y el ciprés de Monterrey, ubicado en mitad de la calle La Isla en Quito.
Last modified on 2018-02-21