La inestabilidad política, económica y social que atraviesa Ecuador, que en esta última semana se ha puesto de manifiesto con los efectos del paro, ha vuelto a sembrar la desconfianza y preocupación de los tenedores de deuda local e inversores internacionales, quienes para tomar precauciones han empezado a exigir al país mayores tasas de rentabilidad. “¿Qué hemos visto en esta semana? Que si los bonos del Ecuador 2030 se negociaban a una tasa de rentabilidad del 9,1 %, hoy esos mismos bonos se están negociando a una tasa del 10,3 %. Si vamos a bonos de más largo plazo, tenemos que esa tasa pasó de 11,8 a 13,3 %”, explicó Santiago Mosquera, analista económico y decano de la Escuela de Negocios de la Universidad de Las Américas (UDLA).
Fuente: Expreso.
Last modified on 2022-06-17