Gobierno mexicano dice que respetará DDHH de caravana de migrantes hondureños

Las autoridades mexicanas respetarán los derechos humanos, la libre movilidad y el derecho a solicitar condición de refugiados a más de 3.000 centroamericanos que partieron de San Pedro Sula (norte), Honduras el pasado sábado 13 de octubre, informó este miércoles la cancillería de México.

"El Gobierno de México, en apego a una política migratoria respetuosa de los derechos humanos de los migrantes y del derecho internacional humanitario, reconoce el derecho a la libre movilidad de las personas y el derecho de toda persona a solicitar el reconocimiento de la condición de refugiado, tal como lo establecen los diversos instrumentos internacionales de los que el país es parte y las leyes nacionales en la materia", dijeron en un comunicado conjunto las secretarías de Relaciones Exteriores y de Gobernación.

La decisión toma en cuenta el objetivo que la comunidad internacional estableció en el Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular en 2018.

Asimismo, se apega a las disposiciones del marco legal nacional y busca al mismo tiempo "garantizar la seguridad y la integridad de los migrantes y solicitantes de refugio", indica el anuncio mientras la caravana marcha hacia la frontera de Guatemala con México.

Las autoridades mexicanas atenderán particularmente a "niños, adultos mayores y mujeres", puntualiza el documento.

Las medidas anunciadas ante la eventual llegada de la Caravana de Migrantes Hondureños a la frontera sur del país con Guatemala, cerca de la ciudad de Tapachula Chiapas, modifican una llana advertencia, emitida la noche del lunes 15 de octubre, según la cual, "el personal de migración deberá revisar el cumplimiento de los requisitos que marca la ley, y a quienes no los cumplan, no se les permitirá el ingreso".

Pero las nuevas medidas que contemplan el pedido individual de refugio, no descartan que "toda persona que ingrese al país de manera irregular, será rescatada y sujeta a procedimiento administrativo y, en su caso, será retornada a su país de origen, de manera segura y ordenada", puntualiza el anuncio oficial.

REGLAS PARA PETICIÓN DE REFUGIO

Los tres medidas para procesar los pedidos de asilo son, en primer lugar, que quienes cuenten con documentos de viaje y visa concedida por el Gobierno de México, por medio de su red consular, "podrá ingresar al país y moverse con plena libertad en el mismo por el tiempo de vigencia de la visa".

La segunda medida indica que toda persona que ingrese y desee solicitar el reconocimiento como refugiado o ser beneficiario de medidas de protección complementaria, "deberá hacerlo individualmente, de conformidad con la legislación vigente", indica la cancillería y la secretaría de Gobernación.

Ese apartado precisa que la Comisión Mexicana de Ayuda al Refugiados (Comar) es la institución encargada de procesar y analizar dichas solicitudes.

"La legislación nacional vigente establece un periodo de hasta 45 días hábiles, prorrogables por un periodo igual, para resolver sobre las solicitudes", indica el procedimiento.

Sin embargo, advierte que durante este tiempo, el solicitante "deberá permanecer en una estación migratoria", a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM).

La tercera medida indica que las personas que no se sometan a esos procedimientos, e intenten cruzar la frontera ilegalmente, serán "rescatadas", como indica el lenguaje oficial mexicano para las detenciones migratorias.

Tras un procedimiento administrativo, esas personas serán deportadas a sus países, pero aclara que será de manera "segura y ordenada", como el Gobierno mexicano exige que sean tratados sus connacionales en EEUU.

Esta medida, responde particularmente, "al interés del Gobierno de México de evitar que tales personas sean víctimas de las redes de trata y tráfico de personas, mismas que ponen en grave riesgo su seguridad e integridad personal", puntualiza el anuncio gubernamental.

El exdiputado hondureño y líder del partido Libertad y Refundación (Libre) Bartolo Fuentes, reconoció en Honduras que es el organizador y convocante de la caravana del migrantes, a través de redes sociales.

La convocatoria fue hecha un día después de la conferencia por la "prosperidad y seguridad regional" de Centroamérica, convocada por México y EEUU, y celebrada en Washington el 11 y 12 de octubre pasados.

Fuentes, correligionario del expresidente hondureño José Manuel Zelaya (2009-2011), lamentó que, a diferencia de otras caravanas, "esta vez los gobiernos de Guatemala y México se han pronunciado en contra", en consonancia con el presidente estadounidense Donald Trump.

El mandatario estadounidense escribió en su cuenta de Twitter que, cualquier persona que ingrese ilegalmente a EEUU, "será arrestada y detenida, antes de ser devuelta a su país".

Asimismo, informó a Honduras, Guatemala y El Salvador que "si permiten que sus ciudadanos, u otros, viajen a través de sus fronteras y lleguen a EEUU, con la intención de ingresar a nuestro país de manera ilegal", cancelará toda la ayuda estadounidense. (Sputnik)