México y EEUU retoman este miércoles negociaciones en Washington para modernizar el TLCAN

Las negociaciones entre altos funcionarios de México y EEUU para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) continuarán este miércoles en Washington, informó la cancillería mexicana.

Las delegaciones "revisarán los avances de los equipos de negociación del TLCAN", indicó la cartera en un comunicado.

La delegación mexicana está integrada por el canciller Luis Videgaray, el secretario de Economía y jefe negociador, Ildefonso Guajardo, y Jesús Seade, designado jefe negociador por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador.

Los equipos negociadores "darán seguimiento a las negociaciones, tras su encuentro la semana pasada", indica el breve reporte del encuentro de la delegación mexicana con sus contrapartes de la Casa Blanca, encabezados por Robert Lighthizer.

En esta ocasión, estará ausente la jefa negociadora de Canadá, la canciller Chrystia Freeland, quien viajó el martes 31 de julio a Singapur para asistir a una reunión ministerial de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), informó el Ministerio de Asuntos Exteriores canadiense.

El tema de las nuevas reglas de origen del sector automotriz que EEUU quiere restringir está entre los principales obstáculos de la renegociación, admitió el martes Guajardo antes de viajar a la capital estadounidense.

El desafío para alcanzar un acuerdo no es técnico, sino que "es un reto de voluntad política para cerrar las diferencias", dijo el funcionario a la prensa mexicana horas antes de viajar a la capital estadounidense.

Las negociaciones, que comenzaron hace un año, han avanzado dos terceras partes del contenido para actualizar el pacto de 1994 en los temas que no tienen un nivel de conflicto elevado.

De los 30 capítulos que se discuten, al menos nueve han sido cerrados, otros 10 requieren al menos un cinco por ciento para que estén concluidos, según ese recuento.

Otro tema sin solución es la llamada cláusula "sunset" (ocaso), para terminar el tratado cada cinco años, a lo cual se oponen México y Canadá, que ha quedado para el final del proceso para "evitar un enfrentamiento directo" entre los negociadores.

De los capítulos restantes, no necesariamente están completamente abiertos o sin avances, "sino que hay puntos álgidos dentro de eso", explicó Guajardo.

Agosto resulta un mes decisivo para alcanzar el llamado "acuerdo en principio" para lograr que lo firme el presidente saliente Enrique Peña Nieto, que termina su mandato el 1 de diciembre

Sin embargo, su aprobación legislativa corresponderá al nuevo Senado, que comenzará sus trabajos el 1 de septiembre, tres meses antes de que asuma el próximo presidente Andrés Manuel López Obrador.

"Si no es un buen tratado para México, el presidente (Enrique) Peña (Nieto) no lo va a firmar", enfatizó el jefe negociador saliente.

Por su parte, López Obrador, escribió una carta al presidente de EEUU, Donald Trump, en la que expresa su interés en alcanzar un "rápido acuerdo".

La delegación mexicana permanecerá en Washington hasta el 5 de agosto. (Sputnik)