Rafael Correa dice que solo conoció conclusiones de asesinato de general Gabela

 El expresidente ecuatoriano Rafael Correa (2007-2017) aseguró este martes que solo conoció las conclusiones del informe del homicidio del excomandante de la Fuerza Aérea, Jorge Gabela, en las que se aseguraba que el asesinato había ocurrido por delincuencia común y no por razones políticas como afirma la familia del comandante.

"En junio de 2015 estuvo listo ese informe hecho por los ministros, los peritos daban insumos, y básicamente ratificaba las conclusiones a las que había llegado la Fiscalía de que se trataba de delincuencia común; no pudimos encontrar ningún indicio de que se tratara de crimen organizado o de alguna otra circunstancia", afirmó el exmandatario en una comparecencia por videoconferencia desde Bélgica ante la comisión legislativa que analiza el caso.

Correa aseveró que nunca tuvo en sus manos los tres informes realizados por el perito argentino Roberto Meza sobre el asesinato cometido en 2010, sino que únicamente conoció las conclusiones realizadas por el comité interinstitucional que él mismo creó para investigar el caso.

"Se hacía una reunión de trabajo donde me presentaban esquemáticamente, con diapositivas, las conclusiones y se tomaban las decisiones", anotó el exgobernante al apuntar que luego "la orden fue entregar ese informe a Fiscalía, a la Contraloría, a la Asamblea Nacional y a la familia".

El general Gabela, que fue comandante de la Fuerza Aérea entre 2007 y 2008, fue asesinado en 2010 luego de oponerse a la compra de siete helicópteros Dhruv y advertir que serían inservibles para el país.

Cuatro de ellos sufrieron siniestros y los otros tres no pudieron volver a volar.

Al ser cuestionado sobre lo que hizo cuando conoció que el general denunciaba amenazas de muerte, Correa dijo que supuso "que (Gabela) pidió los resguardos necesarios" porque "no todo lo tiene que solucionar el presidente de la República".

Respecto de las razones por las que ignoró los reparos de Gabela a la compra de los helicópteros, el exmandatario reconoció que fue un error, pero argumentó que él no era el responsable de las adquisiciones, pues "el presidente da el apoyo político, pero quien pide los equipos son las propias Fuerzas (Armadas)".

En medio de su comparecencia se registraron varios altercados con legisladores de oposición que provocaron que Correa amenazara en varias ocasiones con finalizar la videoconferencia que mantuvo desde Bélgica.

El exgobernante instó además al perito que realizó el informe en el que supuestamente constaría quiénes fueron los responsables del asesinato, y del que al momento nadie da razón, que divulgue los nombres de los involucrados, pues "¿quién puede olvidar los nombres de los autores de un delito? (…) que los diga mañana mismo".

Sin embargo, el propio Correa no pudo recordar detalles de reuniones que mantuvo con la viuda del general, Patricia Ochoa, en las que esta le entregó documentos con información privilegiada que al parecer no se tomó en cuenta para el caso.

"No recuerdo que me haya entregado documentos, usted entenderá que el presidente no se pone a revisar esto, seguramente lo pasé a la Fiscalía", dijo el expresidente de forma airada.

Inicialmente las autoridades determinaron que el homicidio fue delincuencia común, pero investigaciones posteriores revelaron que había una relación con la postura que tuvo el excomandante respecto de la adquisición de las aeronaves. (Sputnik)