Durante el paro nacional de 2019, el complejo matriz de la Contraloría General del Estado, situado en el centro norte de Quito, fue incendiado por manifestantes y sufrió destrozos tanto internos como externos. Tres años después, el edificio vuelve a funcionar tras una rehabilitación que costó $ 22,2 millones. El complejo matriz cuenta con nuevas seguridades y acogerá a 1.300 funcionarios de servicio. Hay fotografías de cómo quedaron los bloques A, B y D, luego de que los manifestantes invadieran las instalaciones y prendieran fuego: paredes, techos y columnas quemados. Ventanas rotas, autos incendiados y toneladas de ceniza entre los escombros.
Fuente: Primicias.
Last modified on 2022-12-01