La situación laboral de Ecuador para el mes de octubre de 2023 no mostró cambios importantes en su panorama. Con variaciones mínimas en la mayoría de los factores, se experimentan cifras muy similares a las del año pasado. En este artículo, se discutirán los puntos que plantean este estancamiento del empleo.
En el último año, el panorama laboral en Ecuador no ha mostrado cambios significativos. La Encuesta Nacional de Empleo, Empleo y Subempleo (Enemdu) de septiembre de 2023 revela que las tasas de empleo y subempleo se mantienen prácticamente invariables respecto al año anterior (Gráfico 1). Esto no solo indica una estabilidad en la dinámica laboral del país, sino más bien un estancamiento.
Asimismo, el segmento clasificado como “otro empleo no pleno” ha registrado un leve aumento anual, apuntando hacia formas de empleo menos convencionales que se alejan del empleo adecuado. Por otro lado, quizá lo único alentador es ver una disminución en la categoría de “empleo no remunerado” en el sector urbano, lo que sugiere un reconocimiento y valoración más justa del trabajo realizado.
Gráfico 1
Empleo por condición de actividad
En cuanto a la tasa de desempleo, si bien disminuyó respecto al año pasado, es importante mencionar que se aumentó en comparación con agosto de este año. No se trata de la cifra más alta ni de la más baja en lo que ha transcurrido de 2023, lo que plantea la cuestión de si las políticas actuales están teniendo el efecto deseado en la promoción de un mercado laboral más activo y próspero, o si el panorama laboral es indiferente ante estas.
Gráfico 2
Evolución de la tasa de desempleo
A pesar de los esfuerzos del gobierno por promover el empleo a través de ferias de empleo, como la feria “ReActívate” y las distintas ferias virtuales, las estrategias de la administración pública no han tenido un impacto significativo en las cifras de empleabilidad. Los segmentos de empleo adecuado, subempleo, empleo no remunerado han registrado variaciones menores a 0,1 punto porcentual. Por su parte, el empleo informal muestra una variación de 2,3 puntos porcentuales respecto al año pasado.
Gráfico 3
Variaciones anuales del tipo de empleo
LO QUE SÍ AUMENTA: EL EMPLEO INFORMAL
Según la CEPAL, a pesar de que la literatura lo considere en un principio como un fenómeno temporal, se ha evidenciado que el empleo informal es un problema estructural más profundo (Bekkers & Stoffers, 1995). Los datos muestran que las tasas de empleo informal son en general más altas en 2023 que en 2022. En particular, el empleo informal aumentó 2,3 puntos porcentuales en septiembre de 2023 con respecto al mismo mes del año anterior (Gráfico 4).
Gráfico 4
Población ocupada en el sector informal
La concentración del empleo informal tampoco es novedad, las ramas de agricultura, construcción y transporte mantienen las cifras más altas de informalidad, con tasas de 88%, 73% y 61%, respectivamente. Por otro lado, las ramas con menor informalidad son las de la administración pública y enseñanza (Gráfico 5).
Gráfico 5
Informalidad por rama de ocupación
Por lo tanto, no es casualidad que las ramas con menor informalidad sean las que más han contribuido al crecimiento económico. Según el informe de Cuentas Nacionales presentado por el Banco Central, la enseñanza y la administración pública fueron de los cinco sectores que más crecieron en el segundo trimestre de 2023. Asimismo, la enseñanza fue la actividad económica que más contribuyó a la variación anual positiva del PIB (Gráfico 6).
Gráfico 6
Correlación entre crecimiento e informalidad por sector
Los resultados mencionados sugieren que la formalidad en el sector educativo y público puede contribuir al crecimiento económico, mejorar las condiciones laborales y reducir la desigualdad social. Esto se debe a que los trabajadores formales suelen tener acceso a mejores oportunidades de capacitación, formación, protección social y condiciones de trabajo.
CARACTERÍSTICAS DE LA INFORMALIDAD
La informalidad es un problema complejo que tiene causas estructurales y coyunturales. Como señala Norman Loayza (2016), la informalidad es el resultado de la interacción de una mala gobernanza y la falta de desarrollo económico. La mala gobernanza se manifiesta en la excesiva regulación, la deficiente provisión de servicios públicos y la corrupción. La falta de desarrollo económico se manifiesta en la baja productividad, la baja educación y los altos niveles de desigualdad.
Loayza explica que las políticas públicas para reducir la informalidad deben ser cuidadosamente diseñadas, pues deben ser el resultado del desarrollo económico y de mejores políticas y prácticas institucionales. Una reducción drástica podría tener consecuencias negativas como el desempleo, la pobreza y la delincuencia.
En el caso de Ecuador, la recesión económica que ha estado experimentando explica en parte las altas tasas de empleo informal. Sin embargo, también es importante considerar las causas estructurales de la informalidad, como la mala gobernanza y la falta de desarrollo económico.
Los obstáculos de la formalización laboral en el país se extienden hasta la rigidez en las normas laborales y los altos costos asociados a la contratación y el despido, que persisten como una barrera significativa para la formalización. Esta inflexibilidad dificulta la transición hacia nuevas modalidades de trabajo, como el teletrabajo y las plataformas digitales, que están ganando relevancia en el panorama laboral global.
La persistencia de la pobreza, que alcanzó el 27% en junio de 2023, también juega un papel determinante en la informalidad laboral. La necesidad inmediata de ingresos lleva a muchas personas a buscar empleos informales como única opción viable. Además, la arraigada cultura del trabajo informal en Ecuador normaliza esta práctica, reduciendo la motivación de los individuos para formalizarse.
LA EDUCACIÓN COMO FACTOR CLAVE Y POSIBLE SOLUCIÓN
En el ámbito social, la falta de educación y capacitación continúa siguen siendo un reto crucial. La ausencia de habilidades y conocimientos adecuados obstaculiza la empleabilidad en trabajos formales y limita la movilidad laboral de la población. Esto se evidencia en el nivel de instrucción de la población ocupada en el sector informal, es así como del total de empleados informales, el 67% solo completó la educación básica, el 17% no tuvo ningún tipo de educación, mientras que tan solo el 2,2% alcanzó una educación superior. Por el lado del empleo formal, esta situación es completamente opuesta, pues alrededor del 40,9% culminó la educación media o bachillerato, mientras un gran porcentaje de alrededor del 39% alcanzó una educación superior.
Gráfico 7
Nivel educativo por sector de empleo
Además, la limitada capacitación y formación de los trabajadores plantea desafíos considerables. La escasa preparación de la fuerza laboral restringe las oportunidades de acceder a empleos formales y de calidad. Como resultado, muchos individuos se ven obligados a recurrir a opciones en el sector informal, donde se requiere menos especialización y certificación, sin embargo, no se contará con los beneficios propios de un empleo formal, como la seguridad social, un salario justo, etc.
¿SE PUEDE SOLUCIONAR?
Si bien el objetivo de este análisis no es probar la direccionalidad de la relación entre el crecimiento económico y la informalidad en el empleo, es probable que exista una relación bidireccional entre ambas variables, es decir, que se expliquen mutuamente. Por un lado, el crecimiento económico puede generar oportunidades de empleo formal, lo que a su vez puede contribuir a reducir la informalidad. Por otro lado, la reducción de la informalidad puede generar un aumento de la productividad y la competitividad, lo que a su vez puede contribuir al crecimiento económico.
Para impulsar la economía y no solo crear empleo, sino también mejorar la calidad de este, es fundamental implementar políticas laborales que protejan los derechos de los trabajadores y garanticen su bienestar. Esto incluye fortalecer los mecanismos de inspección laboral y establecer una estrategia de protección social sólida y universal, algo que el Gobierno de Guillermo Lasso no logró hacer.
(*) Analista económica Revista Gestión.
Last modified on 2023-11-05