Muchas veces al terminar un proceso de planificación estratégica, los directivos de las organizaciones se preguntan: ¿Qué sigue? ¿Cómo implementar la ruta de lo planificado? ¿Cuál debe ser el esquema cumplir las metas y alcanzar la visión construida?
La concepción pragmática de que la estrategia debe volverse una práctica cotidiana, tanto en el ámbito comercial como en los procesos financieros que deben operar con un presupuesto acorde a la propuesta corporativa. De igual forma, el planeamiento logístico debe llevarse a cabo con esquemas de abastecimiento y distribución debidamente alineados. A esto se suma un plan de tecnología que garantice operatividad, continuidad y optimización permanentes. Para finalizar, es clave el rol del talento humano: la selección, inversión y capacitación del personal es determinante en el éxito de la organización. El personal adecuado será el que apuntale a concretar una visión de futuro, cumpliendo misión y objetivos.
El esquema que se detalla a continuación es un aporte clásico de la teoría de la estrategia, consolida el procedimiento despliegue estratégico.
PROCEDIMIENTO ESTRATÉGICO
Los pasos de la estrategia
- Etapas
Se debe considerar tanto el largo y mediano plazo; los hitos propuestos se deben alinear con el plan estructurado y se debe construir caminos potenciales para las etapas subsiguientes.
- Ventajas competitivas
El plan de negocio en sus etapas de exploración e intencionalidad debe satisfacer las necesidades del mercado objetivo mediante la construcción de ventajas competitivas que logren metas y aporten a un devenir positivo.
- Inteligencia de mercadotecnia
Se debe procesar la inteligencia de mercadotecnia y concretar un plan en que las acciones tengan implícita la construcción de atributos, relaciones y una imagen sostenible y consistente maximizando las expectativas del cliente y del mercado.
- Métricas periódicas
Es clave estructurar un plan de ventas con métricas periódicas alrededor del ejercicio anual. Estas pueden ser mensuales o trimestrales (como máximo), el nivel de ingresos obtenido dará el parámetro de si el camino es el correcto en la ejecución cotidiana de la misión de la empresa.
- Personalización y priorización
La personalización y priorización de las necesidades de los segmentos jerarquizados (mediante un buen esquema CRM por ejemplo) apuntalará la efectividad del plan de ventas, permitiendo que las cuentas clave, tanto reales como potenciales, aporten a la meta de ventas fijada como parte del sistema de guías construidos en la estrategia.
- Objetivos tácticos definidos
Viabilizar a nivel táctico el esquema de grados, identificando bajo un formato territorial o bien organizado, los productos y servicios clave que sirven para cimentar la mezcla de valor bajo parámetros de medición y gestión cuantificables. Se deben calcular y programar aspectos logísticos que apuntalen los objetivos tácticos definidos.
- Seguimiento y control
Se debe implementar un sistema de seguimiento y control de la estrategia en tiempo real con indicadores de alerta temprana para realizar las recalibraciones y ajustes que la ejecución amerite.
*Ingeniero comercial, con especialización en finanzas y habilidades múltiples. Director de Management Advise and Consulting (MA&C). Docente universitario.
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Last modified on 2021-08-17