El efectivo todavía es el medio de pago preferido por los ecuatorianos, pues solo el 11% de la población usa tarjetas de crédito y de débito, según datos del Banco Central. En el país, las tarjetas de débito se convirtieron en 2009 en un medio de pago más, pero su uso comenzó a despuntar en 2015. Los datos de la Superintendencia de Bancos muestran que las compras con tarjeta de débito en POS (puntos de venta por sus siglas en inglés), en el primer semestre de 2017 alcanzaron $ 598 millones, 15% más que en el mismo período de 2016. Y este año se han emitido 497.000 tarjetas más respecto al año pasado. La banca privada tiene el compromiso de incentivar los consumos con medios alternativos al efectivo como parte de su acuerdo con el Gobierno nacional de reducir en $ 800 millones la demanda de efectivo en el 2018. Fuente: El Comercio, 9 de septiembre.
Last modified on 2017-09-20